Con el verano, además de días calurosos, también han llegado las lluvias, y tienes que estar preparada para recibirlas con estilo.

Es cierto que a muchas personas no les gustan los días lluviosos, pero tienen mucho encanto, porque además de que prestan para tomar un delicioso café o un vinito, nos dan la oportunidad de usar prendas y complementos con mucho carácter y personalidad que sería imposible utilizar en otra estación.

¿Sabes cuáles son los básicos que necesitas para protegerte de la lluvia sin perder el estilo? Checa esta lista de las prendas y accesorios que debes tener en tu clóset.

Lo que necesitas para lluvia

Paraguas

Desde luego, antes que todo necesitas un buen paraguas, uno que además de protegerte tenga un gran diseño que refleje tu personalidad.

¿Te sabes la historia de los paraguas? Según cuenta una leyenda china, en el siglo XI existía una joven que se llamaba Lu Mei. Ella retó a su hermano para construir algo que los protegiera de la lluvia. Luego de varios intentos, pegó 32 varillas de bambú a un bastón y colocó trozos de tela entre cada uno.

De acuerdo con historiadores, los primeros paraguas plegables se fabricaron tiempo después, también en China. Para que la lluvia no traspasara la tela, la cubrieron con barniz y cera. Su uso era exclusivo de la nobleza y, posteriormente, pudo utilizarlo toda la gente.

Hoy en día existe una gran oferta de paraguas, pero antes de comprar uno, elige el que realmente te funcione. Los de bolsillo se ven muy lindos, pero si llueve fuerte no te servirán de mucho, porque son muy pequeños y frágiles que no alcanzarán a cubrirte y, si hay viento, podrían voltearse y quedar inservibles. Puedes tener uno, pero sólo podrás usarlo para distancias cortas.

Checa que tenga por lo menos ocho varillas, que la tela debe estar perfectamente cosida a las varillas y, desde luego, debe ser impermeable.

Los de una sola pieza son más fuertes que los plegables, aunque si prefieres los segundos, considera que entre más articulaciones, más fácilmente se romperán.

En cuanto a los diseños, puedes decantarte por los de un solo color o por los combinados. En caso de que te gusten los estampados, puedes elegir uno clásico que armonice con tu guardarropa o uno de algún personaje.

Botas de lluvia

Durante la temporada de lluvia también necesitarás unas botas para que no se te mojen tus zapatos favoritos.

¿Sabías que las primeras botas de lluvia, también llamadas “katiuskas”, se confeccionaron en 1817 por orden del duque de Wellington, por eso también se les conoce como “Wellies”?

Cuenta la historia que el noble necesita un calzado que fuera capaz de proteger sus pies en el campo de batalla, incluso bajo la lluvia. Con el tiempo, otros ejércitos copiaron este diseño, que estaba fabricado en cuero.

Más tarde, las botas dejaron los campos de batalla y comenzaron a fabricarse para todas las personas, pero con plástico.

Si vas a comprarte unas botas de lluvia deben ser antiderrapantes y completamente resistentes al agua, para que los pies permanezcan secos, cómodos y tibios. En función de tus necesidades, puedes elegir unas cortas o largas.

En el mercado hay muchas opciones tanto en diseños como en precios, por lo que puedes seleccionar las que mejor se adapten a tu estilo y bolsillo.

Trench Coat

Otra de las piezas básicas de la temporada de lluvias es el trench coat, también conocida como guardapolvo o gabardina.

Su historia se remonta a finales del siglo XIX. La prenda fue creada por Thomas Burberry quien, cuando apenas tenía 21 años de edad, se estableció en Basingstoke, donde abrió su primera tienda, la cual llevaba su nombre.

El joven creó la trench coat pensando en protegerse del clima británico. Desarrolló un tejido impermeable, reinventando así las prendas para la lluvia que, hasta ese momento, eran pesadas e incómodas.

En 1955, la reina Isabel II le concedió a Burberry una autorización real como proveedor oficial de productos impermeables.

Actualmente muchos diseñadores y firmas tienen sus propias propuestas. Es una prenda muy versátil que puedes comenzar a ponerte en la época de lluvia y continuar usándola durante el otoño.

Para que combine con todo tu guardarropa, prefiere los tonos neutros o el clásico negro. Si tu presupuesto te lo permite, podrías tener también alguno con estampado o de un color vibrante.